Cámaras corporales y cámaras instaladas en las patrullas: Revisión de políticas y recomendaciones
La Oficina de Fiscalización de la Policía está haciendo recomendaciones sobre las políticas del Departamento de Policía de Austin (APD) relacionadas con las cámaras corporación (BWC) y las cámaras instaladas en las patrullas (DMAV) en respuesta a las resoluciones del Concejo Municipal de Austin aprobadas en Junio de 2020.
El reporte "Cámaras corporales y videos digitales móviles: Revisión de políticas y recomendaciones" examina la política actual del Departamento de Policía de Austin (APD) para las cámaras corporales y las cámaras instaladas en las patrullas y cómo se comparan las políticas actuales con las mejores prácticas nacionales sobre labor policial. La investigación de OPO reveló que las políticas de APD no están alineadas con las mejores prácticas nacionales. Además, el reporte propone cambios para mejorar la seguridad tanto para la comunidad como los oficiales de policía.
Algunas preocupaciones sobre estas políticas que OPO trata en su reporte incluyen:
depender de las políticas de Lexipol lleva a pautas ambiguas y elimina a la comunidad del proceso de creación de políticas.
APD depende de una corporación privada llamada Lexipol para redactar muchas de sus políticas. La investigación demuestra que Lexipol no busca las opiniones y comentarios de la comunidad al redactar las políticas.
Las declaraciones actuales de objetivo que rigen las cámaras corporales y las cámaras instaladas en las patrullas no están alineadas con la iniciativa Reimaginando la Seguridad Pública de la Ciudad de Austin.
La investigación indica que las cámaras corporales y las cámaras instaladas en las patrullas tienen el potencial de ayudar a alcanzar las metas de reducir el uso de perfiles raciales, reducir la violencia policial innecesaria y mejorar las relaciones entre la comunidad y la policía cuando los oficiales las usan para grabar sus interacciones.
La política de APD debe revisarse para alinearla con la reciente legislación estatal y proveer más claridad en las leyes estatales cuando sea necesario.
La política de APD relacionada con la desactivación de las cámaras corporales no ha sido actualizada para alinearse con la Ley de la Cámara de Representantes 929, también conocida como la Ley Botham Jean, que enmendó las secciones del Código de Ocupaciones de Texas que rigen el uso de cámaras corporales por parte de los oficiales de paz.
Los conceptos y definiciones actuales sobre las cámaras corporales y las cámaras instaladas en las patrullas no están claros.
Las Órdenes Generales les permiten a los oficiales desactivar el audio de las cámaras instaladas en las patrullas y las cámaras corporales por “razones administrativas”, pero las situaciones que constituyen “razones administrativas” no aparentan ser de naturaleza administrativa ni proveen dirección a los supervisores para autorizar su desactivación.
Las Órdenes Generales actuales permiten demasiada discreción para activar y desactivar las cámaras corporales.
La falta de dirección clara produce interpretaciones y la aplicación inconsistente de la política.
Las Órdenes Generales actuales no requieren que los oficiales documenten su uso de las cámaras instaladas en las patrullas o cámaras corporales en un informe de incidente o expediente de caso.
Las Órdenes Generales actuales no requieren que los oficiales documenten si han usado una cámara corporal durante un incidente. Además, las Órdenes Generales no parecen cumplir con una ley de Texas [Código Ocupacional de Texas, Sección 1701.657(c)] que exige que los oficiales documenten una razón para no grabar con sus cámaras corporales cuando se requería que lo hicieran.
El título “Notificación y Consentimiento” para la Orden General 303.3.2 no refleja su contenido.
La política actual no explica consentimiento y no provee dirección sobre cuándo o cómo los oficiales deben notificarle a alguien que está siendo grabado.
Las Órdenes Generales actuales no requieren que los supervisores inspeccionen las grabaciones de las cámaras instaladas en las patrullas.
Las Órdenes Generales actuales no apoyan la consistencia ni transparencia en el cumplimiento y disciplina.
APD ha aplicado de manera inconsistente la Matriz de Disciplina actual y clasifica a manera de rutina las violaciones a las políticas de las cámaras corporales e instaladas en las patrullas como Referido Menor por Violaciones a Políticas (SR-MPV, en inglés), lo cual permite a APD cerrar estos casos sin acción disciplinaria.
OPO usará un enfoque de tres fases para la nueva redacción de las Órdenes Generales de APD, incluyendo un análisis preliminar sobre las políticas actuales de APD, una campaña de participación comunitaria para solicitar los comentarios del público sobre estas políticas y las recomendaciones de OPO, y un análisis final que explique los comentarios recibidos y comparta los hallazgos con el Administrador Municipal y APD. Este documento demuestra la primera fase de este enfoque.